lunes, 29 de marzo de 2010

29 de marzo sde 2010 - El retorno de ...

Tengo fabulosas noticias. Nunca van a adivinar quien ha vuelto. No, no fue la Pileated. Fue el grandioso, inigualable e inconfundible, único en su clase y símbolo de este país, el águila calva. Sí señores, el águila calva ha vuelto a rondar el lago Chocorua. Espero que hayan estado sentados cuando leyeron este asomboros reporte, porque, al menos yo, casi me puse a llorar de la emoción. Les cuento como fue:

Anteayer en la tarde vi a una de las nutrias paseando por el lago (¿se dice paseando cuando se está nadando?). Entró y salió varias veces y desapareció. Varias horas después veo que se viene acercando a la casa. Pensando en la posibilidad de sacarle una foto de cerca, agarré la cámara y el largavistas y me fui al pequeño muelle que hay acá en la casa. No vi a la nutria, pero de pronto miro hacia el cielo y en ese instante en que uno ve algo y el cerebro ya lo ha catalogado, ese instante que no dura absolutamente nada, veo al Águila Calva (de ahora en adelante con mayúscula porque ya es un personaje de nuestros cuentos). Me quedé paralizada, sin saber qué hacer. Voló hacia un árbol al lado de donde estaba yo y se quedó muy posada en la rama. Yo pensaba que tenía que ir a buscar el súper largavistas para verle hasta los hoyos de la nariz, pero al mismo tiempo temía que se fuera y me perdiera ese momento de contemplación, aunque lejano. Pues en un dos por tres, salí disparada a la casa, agarré el súper largavistas y lo instalé en el muelle. Y ahí estaba el Águila. Su cabeza blanca, su mirada intensa, observando los alrededores. Ese fue el momento en que casi me puse a llorar. Entonces levantó vuelo, dió varias vueltas en el aire, las que seguí todo el rato con el largavistas, y se fue. Jo-der. Vaya animal. Llamé a Baba para contarle que teníamos este fabuloso visitante y me dijo "Parece que en vez de limarme las uñas debería dedicarme a mirar por la ventana". ¡Ja! Lo otro chistoso fue que cuando pasé corriendo a buscar el largavistas Chipi estaba cerca, pero creo que quedó un poco descolocada por mi comportamiento. Como que me quiso gritar, pero sólo le salieron unos chillidos indignos de ella, así que se quedó quieta en su rama.

Uf, después de esto, lo que sea que les cuente ya no será tan interesante. De todos modos, les diré que ahora estamos donde Tom con sus dos perros y su gata. Y es absurda la cantidad de comederos de pájaro que tiene. Pero aún más absurdo es la cantidad de pájaros que vienen a los comederos. Yo diría que sin exagerar hay 100 Gold Finches que vienen todos los días y al mismo tiempo. Una bulla en el jardín que ensordecería al más sordo de los abuelitos. Gracias a esta abundancia, hemos visto pajaritos nuevos: Purple Finch (macho y hembra) y Evening Grosbeak (también macho y hembra).

Lo último que les tengo que contar es que avistaron un oso en North Sandwich, que es un pueblo cerquita de Chocorua. Al parecer, los osos saben que donde Tom hay mil comederos de pájaro, así que suelen aparecerse por su propiedad. ¡UUUUUUUUUU!

2 comentarios:

  1. Sería genial ver un oso! En este época de primavera es cuando más hambre tienen!!!
    Aunque generalmente se van cuando ven a los seres humanos, a veces entran a las cocinas a ver que pueden encontar para comer!!!!
    Que lo pasen bien donde Tom. abrazos, kata

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  2. Amore, que emocionante ver el aguila calva!!
    Vi tus ojitos llenos de lagrimas por tener el privilegio de estar tan cerca de esa ave...que lindoooo
    Y bueno,,los osos me imagino que deven ser adorables...Estaras feliz en casa de Tom, con taaantos pajaritos y la gata regalona..aprovecha!!!

    Besitos y amor
    Ma.

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