domingo, 14 de marzo de 2010

14 de marzo de 2010 - El final del mapache

El otro día fui a que me sacaran las huellas digitales en el Servicio de Inmigración, así que me tienen fichá. Ya no puedo hacer actos delictivos porque me van a encontrar en un dos por tres. Pucha, y yo que estava averiguando donde podría arrendar un caballo y un par de espuelas para robar un banco en El Paso...

Y Chipi se ha transformado en el ser más tierno que jamás he visto. Es que es demasiado. La veo descansar en las ramas apoyando su cabecita y cerrar sus ojitos. La veo tomar las semillas y sujetarlas con las manitos bien juntitas. La veo correr desenfrenada con una piñata en la boca para sentarse en alguna rama favorita y comer. No la resisto. Es bella. Me ha robado el corazón. Y aunque los Chipmonks también son ardillas y también se mueven de esa forma acelerada y graciosa, no logran inspirarme esa ternura tan profunda que siento por Chipi. Ay el amor...

Bueno, luego de este momento de ñoñez, les cuento que en la casa de Chocorua tenían, o tienen, un mapache embalzamado. Algo totalmente fuera de tono con esta familia amante de la naturaleza y enemigos de las armas. Es horrible. El pobre se ha desteñido y ya no se ve esa máscara negra tan de ellos, ni las franjas de la cola y está lleno de telarañas y polvo. Ha perdido tanto de su escencia que el otro día un amigo de la familia pensó que era un opossum, que es como un guarén menos repulsivo. Y lo peor es que todos lo quieren sacar, pero por alguna razón oculta nadie lo hace (¿flojera? ¿descuido? ¿olvido? ¿en realidad les encanta pero no lo quieren admitir?). Así que, ya que Sebas y yo somos los actuales dueños de casa, hemos decidido retirar ese insulto a la vida silvestra y, quien sabe, darle un entierro como corresponde. Talvez ponerlo en el lago (cuando se descongele) y quemarlo mientras se aleja, o enterrarlo y ponerle piedras encima que marquen su lugar de descanso. Ahí les contaré cual fue finalmente su destino.

5 comentarios:

  1. Si, me han cambiado por una ardilla gruñona.
    Amigos, hemos perdido a Pauli.

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  2. Así que tu ardillita gruñona te tiene enamorada... presiosa tu ardillita... y tu conejito está triste...

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  3. Pauli, por fin alguien se atrevé dehacerse de Rackity Racoon! Es verdad que tiene cierta valor sentimental pero llegó la hora de su destino final!!! Prefiero que lo entierren con una lápida que diga "Here lies rackity racoon, who finally met his doom". okay? besos, kata

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  4. jajaja!!! ok, vamos a enterrarlo entonces. además q quemarlo puede ser peligroso. con todos los químicos q tiene puede explotar o contaminar terriblemente el lago.

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  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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